El maestro Umbral se volvería a reencarnar en su columna de Los Placeres y los Días sólo para hablar de ella.
Ella, con esa palidez blanquecina de las musas de Rubens.
Ella, tan puro márquetin y slogans de hospital sin camas.
Ella, tan imprecisa e inexacta como las bombas del Madrid del No Pasarán!
Ella, es la gran esperanza blanca de la derecha troglodita y cainita española. Esa derecha casposa, descerebrada, bien pagada y sin memoria que reescribe la Historia cada día, con el cinismo y la altivez de los señoritos que siempre iban a caballo.
La señora Ayuso es una mezcla entre Betty Boop sin liga y sin moral y la niñera que mece la cuna de los planes urbanísticos y la desigualdad social.
Ayuso es una runner que no suda y sólo saluda, porque el sudor es de pobres y mantenidos y ella tiene un corazón cinco estrellas que habita el olvido de la razón y la coherencia.
Ayuso destila un pijerío altivo y expone a golpe de chotis lingüístico, una sintaxis tan anodina como única, que la hace la más paleta de todos los que son capaces de ganar elecciones.
Doña Isabel es la posmodernidad en versión castiza, que seguro que con los años acabará teñida de rubia, al estilo de su ídolo Donald Trump.
Esta señora ,que defiende su trending topic de comunismo o libertad, seguro que suspendería todos los exámenes de Historia.Su libertad es una moneda de oro en manos de los que más han tenido siempre. Y su anti-comunismo, una hiriente necedad que atenta contra la dignidad de los que lucharon por la libertad y los derechos sociales y democráticos en España.
Ella, mitad narciso, mitad yegua desbocada a golpe de titular. Con la empatía de un corazón de plomo hecho de suites de lujo y empresas.
Ella, tan extrema y tan derecha, paladín de los impuestos son para los tontos y la riqueza para quien se la merece. Ella, es la última moda, de la derecha pepera, para ganar elecciones.
Solo puedo decirte, Isabel, que nunca serás la musa de ningún poeta.Por eso Isabel. Doña Isabel, permítame dedicarle unos versos, que Jaime Gil de Biedma escribió a otra que se llamaba como Vd., a modo de epílogo y resumen de su aportación al progreso de los pueblos, España y la humanidad.
Isabel Doña Isabel
Que con la ilusión que te has entregado
no la comprenden ellos , niña Isabel ten cuidado,
porque estamos en España, porque son uno y son lo mismo,
los engañados de tus votantes
y las mentira de tu partido.
Salud, amor y alguna verdad, Doña Isabel…
